Gabriela-La guerrera

Gabriela-La guerrera

deficientes gata2

Gabriela es una de nuestras guerreras que ha estado luchando desde su niñez contra la enfermedad Deficiencia en Gata2 sin saber que la padecía. Dios me concedió la maravillosa oportunidad de conocerla, cuando yo me encontraba en los preparativos para realizarme el trasplante de médula ósea en el NIH. Recuerdo ese día a la perfeccción, estaba sumergida dentro de las publicaciones de la web, intentando abarcar toda la información posible antes del trasplante para que las personas pudieran documentarse al respecto, porque sabía muy en el fondo, que con el tratamiento no siempre me encontraría en disposición de poder escribir y justo en ese instante, el 2 de noviembre del 2015, a las 17:32, recibí un mensaje de Gaby.

En nuestra conversación, Gaby me comentó que había sido diagnosticada con la enfermedad en Mayo del 2014, pero que aún estaba esperando el diagnóstico molecular. Que había tardado muchos años para recibir un diagnóstico fiable porque se lo iban atribuyendo a otras patologías. Me expresó: «Como son las cosas, a penas iba a buscar a alguien para que creara una web para concientizar sobre esta enfermedad y hoy decidí dar una búsqueda en google y encontré el blog unidos contra deficiencia en Gata2. En México, de momento, somos 2 personas diagnosticadas. Estoy súper emocionada de haberte encontrado. Somos muy pocos ahora mismo y estamos conscientes de que es muy difícil diagnosticar una enfermedad de este tipo. Wendy, serás nuestro punto de referencia de ahora en lo adelante para lo que vamos a pasar por el proceso de trasplante».

Nos actualizamos cada una, contando nuestros procesos y me preguntó si era posible investigar con mis especialistas la forma de que alguien la pudiera ayudar en México para tratar la enfermedad y qué pasos iba a tener que dar. No lo dudé ni un instante y gracias al Dr. Holland; un ser humano maravilloso, que existe en el hospital, se logró remitirla con una especialista en México (Dra. Jennifer Cuellar Rodríguez) que había trabajado en el NIH con este tipo de condición.

Le pregunté a Gaby, si estaría dispuesta a compartir su experiencia con nosotros y con mucho gusto, me dijo: «Sí, claro que estoy interesada». Desde ese instante, Gaby y yo, hemos marcado una amistad basada en la empatía y solidaridad.

El testimonio de Gabriela en especial me emocionó mucho, me sentí muy identificada con todo lo que ella ha tenido que pasar, porque es muy difícil y traumático no contar con información idónea en este tipo de situaciones. También, el hecho de saber que a kilómetros de distancia puedes ayudar a salvarle la vida a alguien; eso, eso señores! es lo más gratificante de esta labor humanitaria, solidaria y voluntaria.

Gabriela-La guerreraDeficiencia en Gata2

Les comparto la historia de Gabriela (La guerrera), una Mexicana dulce, alegre, sencilla, afable, decidida y con todas las ganas de vivir. Sus palabras son más que un aliciente para todos los deficientes en Gata2.

Gabriela (La guerrera) nos demuestra ser una verdadera luchadora y una persona bastante resiliente para superar los obstáculos con los que se va encontrando a cada paso de su camino. Gaby, te agradecemos de todo corazón hacernos parte de tu historia.

Nombre: Gabriela Soledad Landin Calleja

Edad: 25 años

Intereses: Trabajar, viajar, sentarme en la puerta con mis mascotas, ver un lindo atardecer. El mayor de todos: «disfrutar la vida». Desde una pequeña hormiga que va pasando hasta un atardecer rojo que cubra todo el cielo. 

1-¿Cuáles fueron los primeros síntomas que se manifestaron en ti y sirvieron de alarma para que te dieras cuenta que algo no andaba bien en tu organismo?

Siempre he sido muy “enfermiza” desde niña, las infecciones son algo recurrente en mi vida y desde pequeña aprendí a tener hábitos de higiene un poco más estrictos que los de mis amiguitos y así crecí, hasta que se convirtió en una costumbre, una forma de vida. El problema empezó algunos años atrás que fue cuando me di cuenta de que estaba tardando más en combatirlas y empezaron a darme antibióticos más fuertes y ayudarme con inmunoglobulinas. Desde ahí, supe que no era normal que me inyectaran algo que mi organismo “según produce” naturalmente.

2-¿Qué tiempo tuviste presentando esa sintomatología sin haber recibido el diagnóstico?

Toda mi vida había sido así, pero hace algunos años, mi dermatóloga sospechó de algún tipo de inmunodeficiencia porque las inyecciones de inmunoglobulinas no daban el resultado que esperábamos para combatir las infecciones, sobre todo las virales.

Tengo que decir que he visitado muchos médicos, he viajado en busca de especialistas y precisamente en uno de estos viajes me dijeron: -Si has agotado todos los tratamientos, no es la medicina, es tu organismo, tenemos que revisar tus CD4 Y CD8 porque sospechamos que es algún tipo de inmunodefiencia. Ve a tu unidad de medicina familiar y plantéale eso a tu médico familiar, el te conoce mejor, y lleva tu expediente y así lo hice. Le planteé la idea a mi dermatóloga y estuvimos de acuerdo que iba a ser un proceso largo cuando me envió al Centro Medico de Occidente en Guadalajara, Jalisco, México, pero sabía que era el inicio del fin, de al fin saber qué se escondía detrás de todo ésto.

3-¿Cuándo fue que te diagnosticaron la enfermedad Deficiencia en Gata2 y cómo te sentiste al saberlo?

Fue hace 2 años. No la entendía, digo, comprendía lo básico del sistema inmunológico del ser humano, pero a nivel de inmunodeficiencias no. Buscaba información en internet y no existía, sólo tenía conocimiento de lo que mi médico especialista decía.

Un día me entregó un reportaje en inglés sobre la enfermedad, decía síntomas que yo conocía, hablaba de personas como yo, de distintas edades y países, y de alguna manera me tranquilizó un poco. Tengo que reconocer que lloré mucho, pero recordé que debido a que es muy rara la enfermedad, sabía que de alguna manera, Dios se había fijado en mí para tenerla, entonces solo es una batalla más en una guerra llamada vida y El le da las mejores batallas a sus mejores guerreros.

4-¿Antes de ser diagnosticada como Deficiente en Gata2, habías sido diagnosticada con otra (s) enfermedad (es) distinta (s)?

He tenido muchas enfermedades, las virales es con las que peor me ha ido, una varicela complicada casi me cuesta la vida a los 17 años y la recuperación fue de año y medio, el vph vulgar también es recurrente, accesos cutáneos, enfermedades respiratorias, y demás infecciones por hongos y bacterias.

Pero la peor es una condición llamada Hipoplasia medular que es cuando la medula ósea produce células sanguíneas por debajo de su nivel normal y la cavidad medular es ocupada por tejido graso, que es improductivo. Entonces para ayudar a la médula, me inyecto un medicamento llamado filgastrim que eleva mi numero de leucocitos, linfocitos y neutrófilos.

5-¿Cuál ha sido el mayor reto en el que te has visto sumergida a causa de la enfermedad?

Retos han existido muchos; todos pequeños, todos superables desde mi punto de vista.

Día a día es un reto, ¿sabes? No puedes bajar la guardia un día, no debes de confiarte, debes mantener tus hábitos de higiene siempre, debes de tomar tus vitaminas, debes de inyectarte tus medicamentos, debes tratar de hacer un poco de ejercicio y si el cansancio te deja, vivir una vida lo más cercana a la normalidad.

6- ¿Cómo lograste superarlo?

Las ganas de vivir son más que suficientes, el apoyo de la familia, de la pareja, de los amigos y de los médicos ayuda, pero si en tu mente tú no te planteas seguir adelante y superarlo no se te dan. Debes de levantar la cabeza y no dejarte caer.

7-¿Alguna vez has sentido que la enfermedad te ha limitado o impedido hacer algo, que aunque quisieras, no puedes hacerlo en ese momento?

Sí, debes de quedarte en casa muchas veces, porque no te puedes levantar y te pierdes muchas cosas, el cansancio es constante en mí, a veces paro y respiro y me digo a mi misma: «Descansa un rato, se vale tomarte un momento, el mundo sigue y cuando estes mejor seguiras con el».

8-¿Cómo te sientes al pensar que tendrás que someterte al riguroso proceso de trasplante de médula ósea?

Me da un poquitín de miedo, pero me alegraría empezar el proceso lo antes posible porque es la cura para esta enfermedad, entonces que venga como tiene que venir.

9-Todos tenemos ángeles de luz que están ahí para apoyarnos en cada prueba de amor que Dios nos pone. ¿Quiénes consideras que son o han sido tus ángeles de luz en esta nueva prueba que comenzarás?

Definitivamente aquellos médicos a quienes Dios pone para guiarte y entender tu enfermedad, no sabes lo bien que me han tratado, informado y apoyado. 

La familia, la pareja, los amigos que han estado por ahí preguntando por tu salud y ayudándote cuando los ocupas con las manitas que te aplauden y haces que des gracias a Dios por tenerlos cerca.

10-¿Quién será el ángel de luz que te donará la médula ósea? ¿Cuál fue tu reacción al recibir la noticia?

Será mi madre, es increíble!!! porque me dará vida una vez más y es lo maravilloso de la medicina; mi madre me dará otra oportunidad de vivir a través del trasplante de su médula osea y siempre estaré agradecida con ella porque ella fue la primera que notó que algo no andaba bien conmigo desde que yo era bebé, entonces se dedicó a cuidarme y educarme en cuanto a hábitos de higiene un poco más estrictos que los de mis hermanos, a cuidarme y apoyarme cada vez que mi salud se ha visto comprometida, ella es en definitiva mi ángel de la guarda.

11-¿Sabemos que eres muy valiente Gaby y que saldrás bien fortalecida de todo ésto. Cuando logres superar la prueba del trasplante, nos gustaría saber: ¿Cómo se visualiza Gaby en lo adelante?

Después de ésto, no habrá nada que pueda lastimarme, nadie que me pueda decir que no se puede. Me han dicho mis médicos que después conoceré una vida perfectamente normal. ¿Qué es normal? Me pregunto, valorar la vida es lo normal, yo estoy consciente de que tendré otra oportunidad y definitivamente no la voy a desperdiciar.

12-¿Qué mensaje o frase te gustaría dejarles a los demás guerreros deficientes en gata2?

Paciencia!!! Mucha paciencia y muchos cuidados, a todos nos llega la hora de defendernos y nacimos preparados. ¿Saben, por qué? «Porque desde que nacimos hemos aprendido a defendernos con las pocas defensas que tenemos y aquí estamos y seguiremos defendiéndonos, al defenderte sabrás que luchaste y al luchar sabrás que vale la pena cada paso, que valió la pena cada enfermedad y que vale la pena cada momento de esta vida».

Gabriela-La guerrera